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Cartas a las escuelas


Cartas a las Escuelas - 15 de julio de 1979

El interés fundamental de estas escuelas es dar origen a una nueva generación de seres humanos que estén libres de la acción egocéntrica. Ninguno de los otros centros educacionales se ocupa de esto, y es nuestra responsabilidad, como educadores, crear una mente que carezca de conflicto dentro de sí, y de este modo terminar con la lucha y el conflicto que existen en el mundo que nos rodea. ¿Puede la mente, con su compleja estructura y movimiento, liberarse de la red que ella misma ha urdido? Todo ser humano inteligente se pregunta si es posible poner fin al conflicto entre hombre y hombre. Algunos han investigado esto muy profundamente, intelectualmente; otros, viendo lo irremediable de ello, se amargan, se vuelven cínicos, o esperan que algún agente externo los redima de su propio caos y miseria. Cuando nos preguntamos si la mente puede librarse de la prisión que ella misma ha creado, ésa no es una pregunta intelectual o retórica. Se formula con toda seriedad; es un reto al que usted tiene que responder no según su conveniencia o comodidad, sino de acuerdo con la profundidad de ese reto. Tal respuesta no puede posponerse.
Un reto no consiste en preguntarse si ello es posible o no, si la mente es o no capaz de liberarse; el reto, si de algún modo tiene valor, es inmediato e intenso. Para responder a él debe uno tener esa condición de intensidad e inmediatez - debe sentirla. Cuando existe este intenso modo de abordar el reto, entonces la pregunta tiene implicaciones inmensas. El reto está exigiendo de usted la más alta excelencia, no sólo intelectualmente sino en cada facultad de su ser. Este reto no es exterior a usted. Por favor, no le atribuya una existencia externa - que equivale a convertirlo en un concepto. Usted está exigiendo de sí mismo la totalidad de su energía.
Esta misma exigencia barre con todo control, toda contradicción y cualquier oposición interna. Implica una integridad total, una completa armonía. Esta es la esencia de la acción no egocéntrica.