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LA VERDAD NO TIENE TRADICIÓN, NO PUEDE SER TRANSMITIDA

 

   “… Estos encuentros o reuniones no son un entretenimiento, propaganda o un intercambio de ideas; se trata de interesarnos de verdad y profundamente en producir una revolución religiosa radical. Para eso se requiere cuestionarse uno mismo intensamente; se necesita cuestionar todo lo que el hombre ha creado, cada actitud, cada valor, cada tradición, cada relación, y eso es lo que vamos a hacer; no vamos a dejar piedra por remover. No hay nada que sea divino o sagrado; en consecuencia, para investigar se necesita una mente muy aguda, clara y precisa, no una mente cegada por ideas, palabras o sentimientos. Así pues, para pensar con gran claridad debe haber libertad, de lo contrario, no es posible pensar libremente. Si uno es hindú, parsi o lo que sea, si esa es la base, si ese es el punto de partida del pensar, será totalmente imposible pensar con claridad, porque no hay libertad. De modo que el requisito fundamental para investigar es la libertad, porque entonces uno puede empezar a cuestionar.

   … Cuando estamos atemorizados nos aferramos no solo a las cosas externas, sino también a las internas, tales como la tradición. Para la mayoría de las personas de edad avanzada y para las que en lo interno son insuficientes y vacías, la tradición importa muchísimo. ¿Han notado esto entre sus amigos, sus padres y maestros? ¿Lo han notado en sí mismos? En el momento en que hay temor, temor interno, tratan de ocultarlo bajo la respetabilidad, siguiendo una tradición, y así pierden la iniciativa. A causa de que les falta iniciativa y solo siguen a otros, la tradición se vuelve muy importante, la tradición de lo que dice la gente, la tradición de lo que ha sido transmitido desde el pasado, la tradición que carece de vitalidad, del sabor de la vida, porque es una mera repetición sin significado alguno.

   … Las personas que tienen miedo imitan a otras; se aferran a la tradición, a sus padres, a sus esposas o maridos, a sus hermanos. Y la imitación destruye la iniciativa. ¿Saben?, cuando dibujan o pintan un árbol, no imitan el árbol, no lo copian exactamente como es, lo cual sería una mera fotografía. A fin de tener la libertad necesaria para pintar un árbol o una flor o una puesta de sol, tienen que sentir lo que estas cosas les comunican, el significado, el sentido que tienen. Esto es muy importante, que traten de comunicar el significado de lo que ven y no que meramente lo copien, porque de ese modo están abiertos al proceso creativo. Y para esto tiene que haber una mente que sea libre, que no esté cargada con la tradición, con la imitación. Miren nada más que sus propias vidas y las vidas de quienes los rodean, vean lo tradicionales, lo imitativas que son. 

   Pasan diez o quince años de sus vidas en la escuela adquiriendo información; sin embargo, nunca se toman tiempo, ni una semana, ni siquiera un día, para pensar plenamente, completamente en algunas de estas cosas. Por eso parece tan difícil, pero en realidad no lo es en absoluto. Al contrario, si le dedican tiempo podrán ver por sí mismos cómo trabaja la mente de ustedes, cómo opera, cómo responde. Y es muy importante que empiecen a comprender su propia mente mientras son jóvenes, de otro modo crecerán siguiendo alguna tradición, lo cual tiene muy poco sentido; imitarán, o sea, que seguirán cultivando el temor y así nunca serán libres.

   … La experiencia condiciona al cerebro, es obvio, y experiencia significa conocimiento. Para aprender a conducir un auto se necesita experiencia, debe sentarse en el vehículo, aprender a manejarlo y con la experiencia sabrá llevarlo, ¿Es el conocimiento el factor base de nuestro condicionamiento? EI conocimiento es la repetición de cierta tradición. El conocimiento es necesario, de lo contrario no podríamos movernos, conducir un coche, trabajar, siempre que uno tenga trabajo. El conocimiento es necesario en cierta área física, pero el conocimiento también condiciona nuestro cerebro. Nos programan los periódicos, las revistas, la constante repetición de que soy inglés, francés o indio, esa constante repetición embota el cerebro, lo hace repetitivo y mecánico. Tal vez puede parecer una forma de vivir segura, pero es muy peligrosa. La repetición de la cultura en los distintos países es un proceso de aislamiento y, por tanto, crea división y guerra. Esa solo es una razón más de la guerra. ¿Somos conscientes de que nuestro cerebro ha sido programado?

   … No obstante, para investigar es necesario que haya libertad; para investigar de manera profunda y duradera uno no puede depender de los libros, de las ideas, de las tradiciones, porque sin libertad no es posible investigar; si la mente está aferrada a cualquier dogma, tradición, creencia, etc., no es posible investigar. El problema para la mayoría no consiste en que seamos incapaces de inquirir o investigar, sino en que, al parecer no somos capaces de desprendernos realmente de las cosas, de dejarlas de lado y, por tanto, no somos capaces de tener una mente renovada, joven e inocente que pueda mirar el mundo y todos los terribles acontecimientos que están sucediendo.

   … La ciencia, las matemáticas y la tecnología de que dispone ahora el ser humano son absolutamente necesarias. Sin embargo, vivir en este mundo de tecnología, información y conocimientos que se desarrollan tan rápidamente, tiende a hacer la mente muy superficial, y la mayoría de nosotros nos contentamos con seguir con esa superficialidad, porque el conocimiento y la tecnología nos dan más dinero, más comodidad, más de la llamada libertad; cosas, todas ellas, que son altamente respetadas por una sociedad degradada, que está desintegrándose. Así pues, la mente que quiere ir más allá de sí misma, ha de comprender las limitaciones de la tecnología, el conocimiento y la información, y estar libre de tales limitaciones.  

   … ¿Saben lo que es una mente libre? ¿Alguna vez han observado la propia mente? No es libre, ¿verdad? Siempre están a la expectativa de lo que sus amigos dicen de ustedes. Esa mente es como una casa cercada por una valla o por un alambre de púas. En este estado nada nuevo puede acontecer, lo nuevo solo es posible cuando no hay temor.

   La verdad no tiene tradición, no puede ser transmitida.”

    J. Krishnamurti

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