traductor para el blog blogger web

LA CULTURA EN LA CUAL VIVIMOS MODELA NUESTRO PENSAMIENTO

 

   “… Estamos relacionados unos con otros y esa relación crea esa estructura que llamamos «sociedad», y esa estructura es la que controla la relación. Es decir, usted y yo estamos relacionados, estamos en comunión el uno con el otro, y desde esa comunión, esa relación, creamos y edificamos esa estructura llamada «sociedad». Esa sociedad controla nuestras mentes, moldea nuestros corazones y nuestras acciones; no importa si vive en una sociedad comunista, en una sociedad hindú o cristiana. La sociedad, con su estructura, moldea la mente de todos los seres humanos, ya sea de forma consciente o inconsciente; la cultura en la cual vivimos, con sus tradiciones, religiones, su política, su educación, etc., tanto en el pasado como en el presente, modela nuestro pensamiento. Así pues, para producir una verdadera revolución debe haber una revolución y una crisis en la conciencia, y es necesario cuestionar la estructura de la sociedad.

   … Vamos a investigar la estructura de la sociedad. Esa estructura nace del pensamiento, y nuestro cerebro actual es el resultado de esa estructura social, un cerebro entrenado para competir, para alcanzar metas. Así, como decía, para conseguir poder y para ganar dinero por medios corruptos u honrados. El cerebro es el resultado de esa sociedad, de la cultura en la que nos hemos educado, de los prejuicios, de los dogmas, de las creencias y tradiciones, de la religión. Nuestro cerebro es todo eso; es el resultado del pasado. Por favor, obsérvense a sí mismos; no se limiten a escuchar lo que se está diciendo.

   … A la mayoría nos interesa este tema del cambio, pero lo buscamos a ciegas, estamos confundidos; sin embargo, aquellos de nosotros que seamos un poco serios debemos investigar esa cuestión de cómo generar un cambio en uno mismo. Según creo, la dificultad está en comprender que cualquier cambio en una mente condicionada sólo puede producir otro condicionamiento distinto y no una transformación. Si uno como hindú, como cristiano, o lo que sea, trata de cambiar dentro de ese modelo, eso no puede dar lugar a un cambio real; simplemente será, quizá, un condicionamiento aparentemente mejor, más cómodo, más conveniente, pero en lo fundamental no será un cambio.

   Creo que uno de los mayores obstáculos a los que nos enfrentamos es la creencia de que podemos cambiar dentro del modelo que tenemos; pero es evidente que cuando una mente condicionada por la sociedad, por cualquier cultura, trata de producir un cambio consciente dentro de ese modelo, sigue presa de un proceso de condicionamiento. Si esto está perfectamente claro, entonces nuestra investigación para descubrir lo que es la transformación, y si es posible producir un cambio radical en uno mismo, adquiere enorme interés, una importancia vital.

   … Ahora bien, mi pregunta es: ¿puede la mente dejar de estar condicionada? No se trata de que acepten lo que digo, eso sería demasiado estúpido. Pero si realmente les interesa, descubrirán por sí mismos la posibilidad de que la mente deje de estar condicionada. Sin duda, esa posibilidad sólo existe cuando uno se da cuenta de que está condicionado y no acepta ese condicionamiento como algo noble, o como una parte valiosa de la cultura social.

   … Para descubrir lo que es la verdad, la mente debe observarse a sí misma, debe conocerse a sí misma, lo cual significa estar alerta a todas sus demandas y exigencias conscientes e inconscientes, porque una mente que es el residuo de las tradiciones, de los valores de la llamada cultura y de la educación, esa mente es incapaz de descubrir lo que es la verdad. Puede decir que cree en Dios, pero su Dios no tiene ningún valor, porque sólo es la proyección de su propio condicionamiento.

   … La libertad está fuera de los muros, fuera del patrón de la sociedad; sin embargo, para liberarse de ese patrón uno tiene que comprender todo su contenido, lo cual significa comprender la propia mente. La mente ha creado la civilización actual, esa cultura y esa sociedad esclavas de la tradición; y sin comprender la mente misma, el simple hecho de rebelarse como comunista, socialista, esto o aquello, tiene muy poco valor. Por esa razón es tan importante conocerse uno mismo, darse cuenta de todas las actividades, de nuestros pensamientos y sentimientos; en esto consiste la educación, ¿verdad? Porque si uno se da plena cuenta de sí mismo, la mente se vuelve muy sensible y muy atenta.

   … La verdadera educación significa el despertar de la inteligencia, la creación de la vida integral, y solamente esa clase de educación puede crear una nueva cultura y un mundo pacífico; pero para llegar a alcanzar esta nueva clase de educación, debemos comenzar de nuevo sobre una base completamente diferente.

   … Hemos llegado a un punto de la historia en que es necesario crear una cultura nueva, una clase de existencia muy diferente, cuyos fundamentos no sean la industrialización y el consumo; tenemos que crear una cultura basada en una verdadera cualidad religiosa. Ahora bien, ¿cómo puede uno por medio de la educación dar origen a una mente que sea del todo distinta, una mente que no sea ambiciosa, que no sea envidiosa? ¿Cómo podemos crear una mente que, sin ser ambiciosa, sea extraordinariamente activa y eficiente, que tenga una auténtica percepción de lo que es verdadero en la vida cotidiana, lo cual, después de todo, es religión?”

   J. Krishnamurti