traductor para el blog blogger web

LA MENTE FORMA HÁBITOS PARA ESTAR SEGURA, IMPERTURBADA, PARA TENER CONTINUIDAD

 

   “… Hay dos formas de aprender. Está el aprender cuyo fin es acumular información y posteriormente aprender a través de ella, lo cual significa observarlo todo a través del filtro del pasado. Es decir, mi forma de aprender es observándome a mí mismo, teniendo experiencias y acumulando conocimiento sobre esas experiencias, y observándome luego a través de ellas; o sea, por medio del pasado, porque el conocimiento no es sino eso. Esta es una forma de observarse a uno mismo. La otra es observar la actividad del pensamiento entero, estar atento a él, a todos sus motivos, y nunca acumular; por tanto, aprender es un movimiento constante. Vamos a examinarlo paso a paso. En el pasado, al verme actuar con violencia la he condenado o justificado, y he llegado a la conclusión de que no debo ser violento; puede decirse que he aprendido de ello. Y así, cuando en un momento dado me veo que vuelvo a actuar con violencia respondo de acuerdo con el conocimiento de lo que he aprendido; no observo con mirada limpia; miro esa nueva experiencia de mi comportamiento violento con ojos viejos, con un conocimiento anterior y, por tanto, no aprendo. Aprender significa estar constantemente en movimiento; no movimiento que llega del pasado, sino movimiento a cada instante, de modo que no haya acumulación alguna. 

   El aprender elimina las cosas muertas, el aprender es lo que transmite ese sentir a la acción. Puede que uno al actuar cometa un error, pero ese error forma parte del constante proceso de aprendizaje.

   … Si usted es realmente serio, entonces, cuando observa, cesa el antiguo impulso; la repetición de los viejos patrones, de los viejos modos de pensar, de vivir y de actuar llega a su fin. ¿Es usted tan serio como para descubrir una manera de vivir en la que no exista toda esta confusión, desdicha y sufrimiento? Para la mayoría de nosotros lo difícil es ser libres de los viejos hábitos de pensamiento: "Yo soy algo", "quiero autorrealizarme", "quiero llegar a ser", "creo en mis opiniones", "este es el camino", "pertenezco a esta secta particular". Tan pronto adopta usted una posición, se ha separado a sí mismo y, por lo tanto, es incapaz de mirar el proceso total.

   … Vamos a investigarlo juntos. ¿Qué significa ser serio? ¿Es estar dedicado por completo a algo, a alguna vocación, de modo que uno esté dispuesto a seguirla hasta el final? No estoy definiendo. No acepte ninguna definición. Uno quiere descubrir cómo vivir una clase de vida totalmente distinta, en la que no haya violencia, una vida en la que haya completa libertad interna; uno quiere encontrar eso y está dispuesto a dedicarle todo su tiempo, energía y pensamiento. Yo consideraría a tal persona, una persona seria. A esta persona no se le puede desanimar fácilmente; puede divertirse, pero su rumbo está fijado. Ello no significa que sea dogmática u obstinada, que no se adapte. Escuchará a los demás, reflexionará, examinará, observará. Pudiera ser que en su seriedad se volviera egocéntrica, y ese mismo egocentrismo le impediría examinar. Pero debe escuchar a los demás, tiene que examinar, cuestionar constantemente, lo cual significa que ha de ser sumamente sensible. Tiene que averiguar cómo y a quién escucha. Por lo tanto, está todo el tiempo escuchando, buscando, inquiriendo; está descubriendo con un cerebro sensible, una mente sensible, un corazón sensible; no son cosas separadas. Está inquiriendo con la totalidad y la sensibilidad de todo su ser.

   … Averigüe si su cuerpo es sensible, dese cuenta de sus gestos y de sus hábitos peculiares. Usted no puede ser físicamente sensible si come en exceso, ni puede llegar a ser sensible pasando hambre o ayunando. Uno tiene que estar atento a lo que come. Ha de tener un cerebro sensible; es decir, un cerebro que no esté funcionando en forma de hábitos, en pos de su pequeño placer particular, sexual o de otra índole. ¿Por qué forma hábitos la mente? Daos cuenta de las modalidades de vuestra propia mente y descubriréis por qué. La mente forma hábitos para estar segura, a salvo, cierta, imperturbada, para tener continuidad. La memoria es hábito. Hablar un idioma determinado es un proceso de memoria, de hábito; pero lo que expresa en el idioma, una serie de pensamientos y sentimientos, es también habitual, basado en lo que se os ha dicho, en la tradición, etc. La mente se mueve de lo conocido a lo conocido, de una certeza a otra; por eso no hay jamás liberación de lo conocido.

   … Toda relación genuina requiere un constante estado de alerta y ajuste, pero no de acuerdo con un patrón, Donde hay hábito, seguimiento de normas, ideales, es imposible este estado de flexibilidad, el cual exige constante atención y afecto, y como la mente encuentra más fácil establecer patrones de conducta que estar alerta, procede a formar hábitos; y cuando se libra de un hábito en particular a causa de la aflicción y la incertidumbre, se mueve hacia otro hábito. El miedo por su propia seguridad y su bienestar obliga a la mente a seguir patrones de pensamiento y deseo. La sociedad se convierte así en la hacedora de hábitos, patrones, ideales, porque la sociedad es el prójimo, la relación directa con la que uno está siempre en contacto.

   … ¿Qué implica la investigación? Implica que usted debe estar libre de sus prejuicios, de sus hábitos, de sus conclusiones, de cualquier forma de opinión, de modo tal que su mente esté libre para moverse. Del mismo modo, si usted comprende toda la naturaleza de esta adquisición mecánica de conocimientos y la pone en su lugar exacto, se libera de ella. Y es capaz de tener atención completa, ¿no es así? Cuando hay atención completa, ¿hay un aprender?

   … Aprender es mucho más importante que la meditación o la acción, pero para aprender tiene que haber completa libertad, no sólo consciente, sino profunda e internamente una libertad total. Y en la libertad opera como un todo armónico ese único movimiento de aprender, actuar y meditar. La palabra todo no sólo quiere decir saludable, sino también sagrado; por tanto, aprender, actuar y meditar son sagrados, es realmente una cosa sagrada, y la belleza está en ella misma y no más allá de ella.”

    J. Krishnamurti

            Audiotexto: